Nos levantamos sin poner la alarma, habíamos llegado de madrugada a Shanghai, casi a las 4am estábamos entrando a los cuartos, y necesitábamos dormir. Ya era media mañana cuando salimos del hotel en busca de un lugar donde comer. Andábamos caminando por la Concesión Francesa cuando vimos Ladybug Café y decidimos probarlo. Era ya casi medio día y optamos por un plato fuerte de almuerzo. Yo ordené el Aussie Burger con una pinta de Asahi y pagué ¥103. El burger estaba exquisito, si andan por Shanghai tienen que probar este restaurante.
Muy cerca del restaurante estaba el Parque Fuxing y hacia allá nos dirigimos. El Parque Fuxing fue construido por la dinastía Ming y re-abierto durante la época de la Concesión Francesa en el 1909. Llegó a ser el parque más grande de la ciudad y es el único en Shanghai que mantiene el estilo francés. Nosotros accedimos al parque por la entrada norte y justo al entrar nos encontramos con la estatua de Marx and Engels, los fundadores del marxismo. La estatua se construyó en el 1985 en conmemoración del 90 aniversario de la muerte de Friedrich Engels y se encuentra en la Plaza de la Estatua.
Seguimos caminando y llegamos a una de las áreas más bonitas del parque, el Jardín de Rosas. El jardín tiene forma de óvalo y en el mismo centro hay una fuente con una estatua de una niña. En el jardín vimos rosas blancas, amarillas, rosas y rojas. Luego pasamos por un pequeño parque de diversiones, pero por ser día de semana, estaba cerrado.
En el sur del parque vimos un enorme estanque con plantas de loto. El estanque está rodeado por pabellones y pequeños caminos que recorrimos mientras bordeábamos el estanque. Allí vimos a varias personas de la tercera edad jugando mahjong y cartas en unas pequeñas mesas que quedaban a orillas del estanque.
Al salir del parque caminamos hasta la estación del metro Xintiandi donde cogimos la línea 10 hasta la estación Nanjing East Road. Recorrimos la Calle Nanjing East Road en dirección a The Bund. Según nos íbamos acercando, los enormes edificios de Pudong quedaban más al descubierto. Finalmente llegamos a The Bund, que es uno de los paseos marítimos más famosos del mundo. En los inicios esta área se utilizaba para cargar barcazas con arroz, pero al pasar los años grandes bancos y casas de cambio fueron construidos.
Es un lugar muy famoso entre los turistas, al nosotros llegar lo pudimos comprobar, estaba atestado de personas. Lo mejor que tiene The Bund, aparte de los bonitos edificios con arquitectura art deco, son las vistas que se tienen del otro lado del Río Huangpu. Al otro lado está el distrito de Pudong, que es el distrito financiero más grande e importante de mainland China. Allí se encuentran los impresionantes rascacielos de Shanghai. Dos de los cinco edificios más altos de China se encuentran en Pudong, la Shanghai Tower y el Shanghai World Financial Center.
Nos dedicamos a recorrer todo el paseo, que se extiende por cerca de 1 kilómetro y medio (1 milla), mientras observábamos los bonitos edificios que nos rodeaban. Algunos de los edificios que vimos en The Bund fueron la Antigua Aduana, el Banco de Hong Kong y Shanghai y la Estación Meteorológica. En ese paseo nos encontramos con el enorme toro de bronce, que nos recordó al de la Ciudad de Nueva York. El Bund Bull fue diseñado por el mismo artista que diseño el Charging Bull de NYC y fue inaugurado en el 2010. El toro representa el poder económico de la China actual.
Al terminar de recorrer de The Bund decidimos ir al Jardín Yu que estaba muy cerca y para llegar al jardín atravesamos el pequeño Parque Gucheng. El parque tiene arboles podados con forma de animales como delfines y una laguna con puentes. Lo más que me gustó del parque es que tiene un bosque de bambús donde vimos muchos gatos callejeros descansando bajo la sombra de los bambús. Logré que uno de ellos posara para la cámara y hasta se dejó acariciar.
Salimos del parque y de frente teníamos el Jardín Yu, pero ya estaba cerrado. Junto al jardín está el Mercado Yuyuan al que fuimos a darle una visita. El Mercado Yuyuan es un gran bazar formado por diferentes tiendas que están ubicadas en bonitos edificios de estilo tradicional. Hay muchos pasillos y mucha gente, y los precios no son los más económicos ya que es un lugar muy turístico, pero aún así logre comprarme un imán. También hay centros de masaje, barberías, restaurante y bares. Al final del mercado caminamos por el Puente Jiuqu para poder cruzar un estanque que está bordeado por edificios tradicionales chinos.
Luego nos fuimos a la calle Fangbang Road que está al lado del mercado. Esta calle también es conocida como Old Street y es una de las mejores de Shanghái para comprar cuadros, tallas, esculturas y otros productos artesanales. Al igual que el Mercado de Yuyuan, las tiendas de esta calle tampoco soy muy económicas pues están enfocadas en el turista.
Nos regresamos a The Bund y caminamos hasta el muelle donde se coge el ferry hacia Pudong. El costo fue de solo ¥2 y solo esperamos como 5 minutos en lo que el ferri llegaba al muelle. Tan pronto abrieron el portón del muelle la gente comenzó a empujar y correr para poder coger un buen lugar en el ferry y tener una mejor vista del skyline. Decidí unirme a los chinos y corrí con ellos porque también quería un buen lugar en el segundo nivel del ferri. El paseo en el ferri fue corto, apenas unos ocho minutos, pero logré tomar las fotos que quería.
Al desembarcar en Pudong caminamos directo a la enorme Torre Shanghai que era la razón de nuestra visita a este distrito. La Torre Shanghai es un edificio de records en varias categorías. Es el edificio más alto de China y de toda Asia, y el segundo del mundo. Este mega rascacielo mide 632 metros (2,073 pies) de alto y alberga 128 pisos. Tiene el elevador más rápido del mundo que sube y baja el edificio a una velovidad de 74 km/h (46 mph). Y tiene el mirador más alto del mundo, a 562 metros (1,844 pies) de altura en el piso 121. Tiene una fachada torcida lo que lo hace muy diferente y llamativo. La torre es bastante nueva, fue inaugurada en el verano del 2016.
Llegamos poco antes del atardecer y había una fila kilométrica. Nos tomó cerca de 45 minutos en llegar a la boletería donde pagamos ¥180 por el boleto para subir al mirador. Al entrar al edificio pasamos por una exposición digital y visual del edificio y luego bajamos unas escaleras eléctricas hasta llegar al elevador. Llegamos al piso 121, salimos del elevador y fuimos directo a las paredes del edificio para ver como se veía la ciudad.
Desde la torre vimos como caía el sol y llegaba la noche a la ciudad. Aunque había muchas personas en la torre, logré acomodarme en una esquina pegado a la pared y con mi mini trípode pude tomar algunas fotos long exposure. La ciudad se veía impresionante, todos los edificios y barcos que navegan las aguas del río estaban iluminados. Luego de casi una hora de estar admirando y fotografiando la ciudad bajamos de la torre. Regresamos al muelle, volvimos a pagar ¥2 y cogimos el ferry de regreso a The Bund.
Tomamos unas fotos nocturnas de Pudong y nos fuimos a buscar un restaurante donde cenar. Caminamos y caminamos y los restaurantes estaban cerrados. Cuando ya estábamos a punto de rendirnos y regresarnos al hotel vimos un McDonalds y ahí nos metimos. Al salir de cenar paramos un taxi y nos fuimos al hotel.
El itinerario del viaje lo puedes ver AQUÍ.
Pingback: Ruta 18: Dos semanas en China y Hong Kong
Pingback: Ruta 18 Día 11: HK – Gran Buda de Lantau y Monasterio de los Diez Mil Budas