Comenzamos el día desayunando otra vez biscuits de huevo, tocineta y queso y chocolate caliente de Biscuit Bitch. Pagamos $22 por los dos biscuits con los 2 chocolates. Tan pronto terminamos nos fuimos caminando hasta el Chihuly Garden and Glass Museum que está localizado justo al lado de la Space Needle. Llegamos una hora antes de que abriera el museo, así que nos fuimos a recorrer el Seattle Center que es el completo donde se encuentra el museo Chuhily, la torre Space Needle, el Museo de la Cultura Pop, el Centro de Ciencias del Pacífico, estadio, restaurantes, esculturas y hasta la estación del monorriel.
Lo primero que notamos al comenzar el recorrido del Seattle center fue la enorme escultura Oliympic Iliad. Esta es cultura, también conocida como los Pasta Tube, es una escultura del ruso Alexander Liberman. Consiste en grandes cilindros de acero cortados en diferentes ángulos y longitudes, pintados de rojo. El camino nos llevó a pasar justo debajo de la escultura, así de inmensa es.
Justo al lado del Pacific Science Center vimos la escultura Sonic Bloom, obra del escultor Dan Corson. Sonic Bloom está formada por cinco gigantescas flores que brotan de los terrenos del Science Center cerca de la base de la famosa torre Space Needle. Las flores se iluminan por la noche, gracias a la electricidad generada durante el día por los paneles solares que cada flor tiene en “su cara”.
Seguimos recorriendo el recinto, que es como un parque enorme, y llegaos al Museum of Pop Culture. La fachada del museo tiene un diseño metálico futurista. La estructura fue diseñada por Frank Gehry y se asemeja a muchas de las otras obras de su firma en las que utiliza planchas de metal ondeadas, como el Museo Guggenheim de Bilbao, la Sala de Conciertos Walt Disney y la Torre Gehry de Hanover. Todo amante de la arquitectura moderna deber darse un recorrido por el museo. Aunque yo solo lo vi desde afuera, he visto fotos y por dentro también se ve impresionante.
Luego nos fuimos al museo Chihuly Garden and Glass. Ya había mencionado que el boleto que habíamos comprado un boleto que combinada Space Needle y Chihuly. La noche anterior mientras verificaba las horas que operaba el museo noté que el boleto combinado decía que tenía que visitar Chihuly el mismo día que visitara la Space Needle. Algo que no sabía y ya era tarde para ver el museo ese día. El plan era ir a servicio al cliente a ver si nos dejaban pasar. Pero al entrar al museo, escanearon el código de barras del boleto y entramos al museo sin ningún problema. Nadie mencionó nada acerca de que el boleto era para el día anterior.
Tan pronto entramos al museo caímos en la exposición Winter Brilliance. La colección que vimos en esta sala era de esculturas que simulaban hielo. Chihuly estuvo encargado en el 2015 de la decoración de los escaparates de la tienda Berney’s en la Ciudad de Nueva York en la temporada navideña del 2015. Para ese trabajo se inspiró en las veces que había trabajado haciendo esculturas de hielo y fue así como diseñó varias esculturas de cristal que simulan estalactitas de hielo.
Las siguiente dos salas que vimos fueron la Northwest Room y Sealife Room. Vasijas de varios tamaños, colores y texturas componían la colección de Northwest Room. Para hacer esas vasijas Chihuly tomó como modelo las vasijas que los indígenas norteamericanos hacían. Pero le dio su toque personal al hacerlas de cristal y con formas asimétricas. Las obras que vimos en Sealife Room reflejan el amor del artista por el mar. Al crecer en el noroeste del Pacífico, siempre le gustó el agua. Las figuras de Sealife no aparecen a menudo en las instalaciones de Chihuly. Solo se encuentran esporádicamente en candelabros y torres. La obra principal es Sealife Tower o Torre de Vida Marina de 20 pies/6 metros de altura que incluye muchas criaturas marinas con la esperanza de que la gente disfrute identificándolas.
Seguimos recorriendo el museo y llegamos a una sala donde la obra de arte estaba en el techo, esa colección se llama Persian Ceiling o Techo Persa. La serie Persian (Persa) comenzó con el interés del artista en el cristal persa, romano y egipcio. El techo está lleno de conchas y otros pequeños objetos de cristal de todos los colores primarios que atrapan la mirada de los visitantes.
Al salir del Techo Persa llegamos a la que yo diría es la colección más bonita del museo, la colección se llama Mille Fiori. Las palabras Mille Fiore significa Mil Flores en italiano. Tan pronto lo vi sabía que se trataba de un jardín, y es que para hacer esta colección Chihuly se inspiró en el jardín de su madre en el que creció. El jardín esta colocado sobre una superficie negra de plexiglás que es sumamente reflectante lo que le da una dimensión totalmente diferente y la perspectiva cambiaba a medida que nos movíamos alrededor del jardín.
Dos botes de madera, uno con esferas de cristal que parecían planetas y el otro con objetos de cristal de formas diversas componían la exposición llamaba Float Boat o Bote Flotante. Y justo al lado estaban las últimas dos colecciones del museo, Chandeliers o Candelabros y Macchia Forest o Bosque Manchado. Ambas colecciones muy bonitas e interesantes. Chandeliers salió del deseo de Chihuly de colgar candelabros en Venecia, su ciudad favorita. Mientras que para crear Macchia Forest el artista utilizó unos 300 colores que los alemanes crearon y utilizaban principalmente en vitrales, pero los incorporó en sus obras de cristal.
Ya habíamos recorrido las salas de exposiciones del museo y pasamos al Glasshouse o Invernadero. Tan pronto entré al invernadero, la estructura me recordó el Palacio de Cristal de Petrópolis en Brasil. Y resulta que a Chihuly le fascinan los palacios de cristal, y se basó en ellos para el diseño del edificio. Una gran escultura compuesta por flores amarillas, anaranjadas y rojas colgando del techo es la obra principal del espacio. Y como es una estructura de cristal, a través de las paredes se podía ir apreciando el bonito jardín.
Finalmente fuimos a ver el jardín, que era la única área que está al aire libre. En el jardín, además de plantas y flores, había varias obras del artista. Hay varias torres de cristal dispersas por el jardín y varias esferas en las cuales se puede ver el reflejo de la torre Spice Needle en ellas. Recorrimos las veredas que surcan el jardín y luego nos fuimos a ver a un artista dando una demostración de cómo se hacen las vasijas de cristal.
Salimos del museo y nos fuimos caminando hacia Kerry Park. El Parque Kerry se encuentra en el vecindario Queen Anne y para llegar a él nos echamos unos 25 minutos. Pero es que el parque está en una colina y tuvimos que subir cuestas y escaleras. El parque es pequeño y es más bien un observatorio desde donde se tiene la mejor vista de la ciudad. Y es que no me casaba de tirar fotos, tanto es así que fui tres veces al parque. Desde el parque se ve el centro de Seattle con su torre Space Needle como objeto principal, la bahía Elliott Bay y en días despejados el volcán Mount Rainier. Ese día no era uno de esos días despejados, en cambio el cielo estaba lleno de enormes nubes grises cargadas de agua. Estuvimos como unos 20 minutos disfrutando de las vistas y tomando fotos.
Bajamos del parque y entramos el restaurante Sal y Limón que ya habíamos visto cuando íbamos de subida. Ordenamos burros de steak y varias margaritas. La comida estaba súper buena y pagamos $80 por ese almuerzo. Luego de almorzar nos fuimos caminando hasta el hotel y cogimos una siesta de media hora.
Tras la merecidísima siesta vimos que era un poco tarde para llegar a tiempo caminando al muelle y pedimos un Uber. Teníamos ya los boletos con Argosy Cruises para hacer el tour de la 4pm en barco por el puerto de la ciudad. Llegamos al muelle justo a las 4pm y abordamos el barco rápidamente. La ruta fue de apenas una hora aproximadamente lo cual, dependiendo de las expectativas del visitante, puede que sea corta. En mi casi creo que fue suficiente para mi. El breve crucero nos ofreció unas magníficas vistas del paseo marítimo de Seattle desde la bahía Elliott Bay y una perspectiva única de la ciudad que simplemente no íbamos a tener desde ningún otro lugar.
El guía iba narrando hechos históricos del pasado y presente de la ciudad mientras nosotros íbamos tomando fotos y observando las diferentes áreas de interés. Navegamos por frente del downtown, luego por el parque de esculturas donde la Space Needle se asomaba a las espaldas. Pasamos cerca de los barcos que transportan contenedores y otros con unas grúas enormes. Vimos también unas focas descansando encima de lo que parecían boyas.
Regresamos al muelle de donde partimos, se llama Pier 55. Nos fuimos caminando hasta el hotel y esa noche ordenamos de cenamos poke en el restaurante FOB Poke Bar. Poke es una comida tradicional hawaiana que consiste en pescado crudo como ingrediente principal. Mi plato lo pedí con salmón crudo, camarones, semillas de ajonjolí, lechuga romana, aguacate, cebolla frita, maíz y mangó con un aderezo de cilantro. Fue mi primera vez comiendo poke y estaba tan bueno que regresé al día siguiente. Ese plato tuvo un costo de $13.
Esa noche, justo al atardecer, decidí regresarme a Kerry Park para retratar el atardecer. Agarré un Uber porque si no, no llegaba a tiempo. Y, de todos modos, no llegué a tiempo. Al llegar al parque, ya la hora dorada estaba en sus últimos instantes del día. Pero pude ver por fin el volcán Mount Rainier porque el cielo ya se había despejado y no había ni una sola nube. Estuve hasta que llegó la oscuridad, y con ellos, llegaron las luces a la ciudad. Del parque me regresé a hotel caminando. Fue la mejor manera de terminar un día tan completo, con una panorámica de Seattle.
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